TENER UNA VIDA SALUDABLE

El sol La exposición moderada del cuerpo humano al sol produce, psicológica y fisiológicamente, una sensación de salud, de sosiego natural y bienestar general, además de una acción estimulante; esa formidable fuente de energía que es el sol desencadena una serie de procesos biológicos y bioquímicos esenciales para la vida del hombre:

Favorece la formación de vitamina D, Refuerza el sistema inmunológico, estimula la circulación d la sangre, contribuye a la regulación de estados depresivos, mejora enfermedades reumáticas. Hay que señalar también el beneficioso poder antinflamatorio del sol.

                                                                    

                                                                   

El agua soluciona problemas digestivos. El consumo de agua reduce la acidez estomacal. Si además se consume una buena cantidad de fibra, la salud de €nuestro aparato digestivo mejorará notablemente.

 Limpia nuestro cuerpo. El agua ayuda a que se liberen toxinas

 Reduce la probabilidad de cáncer. Consumir agua suficiente reduce hasta un 45% la probabilidad de tener cáncer de colon y un 50% el cáncer de vejiga.

 Mejora el rendimiento físico. Al hacer ejercicio el cuerpo pierde gran cantidad de agua. Por lo que es necesario reponerla para garantizar el óptimo desempeño.

La cantidad de agua que consumiremos dependerá de nuestras necesidades específicas. Dos litros son sólo una cantidad promedio. Para algunas personas será suficiente un litro y otras necesitarán de tres. Lo importante es que “escuchemos” a nuestro cuerpo y consumamos la cantidad que nos hace sentir mejor.

El descanso tiene solo ventajas, y es que dormir bien y las horas necesarias es la base de una buena salud.
Está demostrado que dormir nos ayuda a rendir más a lo largo del día. Concretamente el sueño consigue que nuestro cuerpo pierda parte del estrés acumulado a lo largo de la jornada. Es fundamental para volver a cargar energías después de toda una jornada de actividad. Refuerza nuestro sistema inmunológico y nos hace más fuertes frente a las agresiones externas.

Por estos motivos es fundamental respetar los tiempos de descanso y dar a nuestro cuerpo el descanso que necesita, ya que si no es así corremos el riesgo que sufrir fatiga, cansancio y hasta trastornos psicológicos y físicos derivados de la falta de sueño. Lo recomendable para conseguir un buen descanso es dormir entre siete y nueve horas. A partir de ahora tenemos que tomarnos más en serio esto, ya que nuestra salud tiene mucho que ver con el sueño

 El aire libre, el contacto con la naturaleza aporta innumerables beneficios para nuestra salud física y mental.

Además permite cambiar de rutina a las personas que viven en la ciudad y disfrutar de actividades que no son posibles en el día a día

El contacto con la naturaleza puede formar parte de nuestras actividades de ocio

Es básico que entendamos que la vida se compone una parte de trabajo y rutina casi inevitables, pero también de momentos de desconexión para disfrutar de las oportunidades que nos brinda nuestro entorno. Para rendir en nuestra actividad diaria es necesario recargar energía y alimentar nuestro espíritu con momentos divertidos, de amigos y de lo nos haga felices.

El ejercicio ayuda a sudar a mantener las arterias flexibles y maleables, previene enfermedades y ataques cardíacos. Baja el  peso corporal, reduce la tensión arterial, la glucosa, los triglicéridos, y el nivel de colesterol. Todos estos son factores que inciden en la aparición de enfermedades cardiovasculares.

 El ejercicio previene la acumulación de grasas en la región abdominal y en las caderas. Éstas grasas contribuyen a la aparición de la diabetes y a sus complicaciones posteriores.

 Un poco de ejercicio cotidiano mejora el estado de ánimo por medio de un incremento de los niveles de la serotonina secretada en el cerebro y mejora el tono muscular.

Por todas estas razones, practicar actividades físicas en forma periódica entre 4 y 6 veces por semana, aunque sean en forma moderada, es muy beneficioso para la salud.

La dieta no existe una  ideal que sirva para todo el mundo, pero sí un criterio en cuanto al tipo de alimentos que deben consumirse dentro de la dieta cotidiana, los que nos lleva a una dieta equilibrada, que garantice que se cubren los requerimientos de energía y nutrientes que nuestro organismo necesita para mantener un buen estado nutritivo, de salud y bienestar. 

Pirámide  para la Dieta Mediterránea Saludable de un adulto sano.